Count it All Joy | Considéralo todo como un gozo
Who would have thought eight months ago, that we would still be wearing face masks, social distancing and once again going into a controlled lockdown, of sorts. It’s as though we are in a bad dream which we can not wake up from. To many of us it is really disturbing, frustrating and confusing. It’s as though God is an old man who has fallen off his stool and is too banged up to do anything about the current events. But is that really the case? Is God too old and too out of touch with reality? Can He really save us if he can’t even control the events going on around us? I mean, as God’s word says, “Consider all joy my brethren when you go through various trials and tribulations”. Can we really consider this a joy? Well, it depends on perspective. As a follower of Jesus Christ we can rest assured that God is in total control and is doing a work above and beyond anything we could ever imagine. We are in a supernatural, spiritual warfare. As the Bible routinely points out, we may live in the flesh but we need to operate in the supernatural world. There is a fight going on that it is way above our paygrade and threshold. But, and this is important, we serve a God who is completely, lovingly and satisfyingly in control. One day, he will take all this chaos and bring under subjection to our Lord and Saviour Jesus.
Now I could continue on and give you my biblical reasons for why things are the way they are, but that would be too incomplete. Rather, I will let the God of this universe, speak for himself and let him reveal his will for our lives. I encourage you to take this following passage, slow it down a bit, build upon each concept and really try and digest its meaning. In light of all scripture, this passage is nothing new and is scattered all throughout the Bible. This passage is from Acts 17, verses 24-31 (NASB) and is even more applicable today than it was 2,000 years ago. Here, Paul is speaking to a group of religious people who worship an, “Unknown God”. Paul makes it clear to them that this, “Unknown”, God has a name and has a purpose. Here is what Paul says to them…
“The God who made the world and all things in it, since He is Lord of heaven and earth, does not dwell in temples made with hands; nor is He served by human hands, as though he needed anything, since He himself gives to all people life and breath and all things; and He made from one man every nation of mankind to live and all the face of the earth, having determined their appointed times and the boundaries of their habitation, that they would seek God, if perhaps they might grope for Him and find Him, though He is not far from each one of us; for in Him we live and move and exist, as even some of your own poets have said, ‘For we also are His children.’
Being then the children of God, we ought not to think that the Divine Nature is like gold or silver or stone, an image formed by the art and thought of man.Therefore, having overlooked the times of ignorance, God is now declaring to men that all people everywhere should repent, because He has fixed a day in which He will judge the world in righteousness through a Man whom He as appointed, having furnished proof to all men by raising Him from the dead”.
That being said, when you begin to understand the depth of this passage, you can really consider it all joy as we walk through this trial and tribulation. Amen!
Quién hubiera pensado hace ocho meses, que todavía estaríamos usando máscaras faciales, distanciamiento social y una vez más entrando en una especie de encierro controlado. Es como si estuviéramos en un mal sueño del que no podemos despertar. Para muchos de nosotros es realmente perturbador, frustrante y confuso. Es como si Dios fuera un anciano que se hubiera caído de su trono y estuviera demasiado golpeado para hacer algo con los acontecimientos actuales. ¿Pero es ese el caso realmente? ¿Es Dios demasiado viejo y fuera de contacto con la realidad? ¿Puede realmente salvarnos si ni siquiera puede controlar los eventos que suceden a nuestro alrededor? Quiero decir, como dice la palabra de Dios, “Hermanos míos, consideren todo gozo cuando pasen por diversas pruebas y tribulaciones”. ¿Realmente podemos considerar esto como una alegría? Bueno, depende de la perspectiva. Como seguidores de Jesucristo, podemos estar seguros de que Dios tiene el control total y está haciendo un trabajo más allá de cualquier cosa que podamos imaginar. Estamos en una guerra espiritual sobrenatural. Como la Biblia señala de manera rutinaria, podemos vivir en la carne, pero necesitamos operar en el mundo sobrenatural. Hay una lucha en curso que esta muy por encima de nuestro nivel. Pero, y esto es importante, servimos a un Dios amoroso que tiene el control completo. Un día, tomará todo este caos y lo someterá a nuestro Señor y Salvador Jesús.
Ahora podría continuar y darles mis razones bíblicas de por qué las cosas son como son, pero eso sería demasiado incompleto. Más bien, dejaré que el Dios de este universo hable por sí mismo y que revele su voluntad para nuestras vidas. Los animo a que tomen el siguiente pasaje, lo escudriñen un poco, se basen en cada concepto y realmente intenten entender su significado. A la luz de todas las escrituras, este pasaje no es nada nuevo y está esparcido por toda la Biblia. Este pasaje es de Hechos 17, versículos 24-31 (NASB) y es aún más aplicable hoy que hace 2000 años. Aquí, Pablo está hablando a un grupo de personas religiosas que adoran a un “Dios desconocido”. Pablo les aclara que este, “Desconocido”, Dios tiene un nombre y un propósito. Esto es lo que les dice Pablo …
“El Dios que hizo el mundo y todo lo que hay en él es Señor del cielo y de la tierra. No vive en templos construidos por hombres, ni se deja servir por manos humanas, como si necesitara de algo. Por el contrario, él es quien da a todos la vida, el aliento y todas las cosas. De un solo hombre hizo todas las naciones para que habitaran toda la tierra; y determinó los períodos de su historia y las fronteras de sus territorios. Esto lo hizo Dios para que todos lo busquen y, aunque sea a tientas, lo encuentren. En verdad, él no está lejos de ninguno de nosotros, “puesto que en él vivimos, nos movemos y existimos”. Como algunos de sus propios poetas griegos han dicho: “De él somos descendientes”. »Por tanto, siendo descendientes de Dios, no debemos pensar que la divinidad sea como el oro, la plata o la piedra: escultura hecha como resultado del ingenio y de la destreza del ser humano. Pues bien, Dios pasó por alto aquellos tiempos de tal ignorancia, pero ahora manda a todos, en todas partes, que se arrepientan. Él ha fijado un día en que juzgará al mundo con justicia, por medio del hombre que ha designado. De ello ha dado pruebas a todos al levantarlo de entre los muertos”.
Dicho esto, cuando comience a comprender la profundidad de este pasaje, realmente puede considerarlo todo gozo mientras atravesamos esta prueba y tribulación. ¡Amén!